RESTAURACIÓN DE LA FACHADA DE LA UNIVERSIDAD

El 11 de noviembre de 1914 don Miguel Atilano Casado presenta un proyecto a las Cortes para arreglar la fachada de la Universidad por un total de 25.000 pesetas.

Desde que en diciembre de 1850 la "Sociedad de Condueños de Edificios que fueron Universidad" compró la manzana universitaria no pararon de hacer pequeños arreglos según el presupuesto que poco a poco iban adquiriendo.

Y llegamos al año 1913. A iniciativa de la "Sociedad Española de Amigos del Arte", en mayo de ese año, la Sociedad de Condueños solicitó al Ministro de Instrucción Pública y Bellas Artes que fuesen declaradas Monumento Nacional la fachada de la Universidad y la primera crujía del edificio al cual pertenece.

Y pasados solamente diez meses, tras el informe favorable de la Real Academia de la Historia, en marzo de 1914 la fachada principal y la primera crujía del patio de Santo Tomás de la Universidad de Alcalá de Henares fueron declaradas como Monumento Nacional.

En ese momento estaban trabajando "en las obras de la fonda", restaurándola. Y la euforia por la noticia de la declaración fue tan grande que se aprobó incluso que se hiciera de mármol hasta el segundo piso de la escalera de la fonda.

Pero había un problema: la fachada de la Universidad había sido declarada Monumento Nacional, pero necesitaba ser restaurada y la Sociedad de Condueños no tenía el dinero suficiente.

Por ese motivo, tal día como hoy de 1914 don Miguel Atilano Casado presentó un Proyecto a las Cortes para arreglar la fachada de la Universidad por un total de 25.000 pesetas.

Tuvieron, y tuvimos, suerte pues el Gobierno dio de los presupuestos del Estado de 1915 la cantidad total del proyecto, 25.000 pesetas, para el arreglo de la fachada de la "Casa de Cisneros", como le gustaba llamarla a Miguel Atilano Casado.

Y los complutenses nos tenemos que congratular, pues la restauración estuvo a cargo del prestigioso arquitecto don Manuel Aníbal Álvarez que, entre otros muchos trabajos, fue el Director de obras del Edificio del Banco de España en Madrid, diseñó la escalera de mármol de doble derrame, la fuente y los dos pabellones del jardín del Palacio de Linares en Madrid y diseñó el Museo Numantino de Soria.

Y como arquitecto restaurador, aparte de la fachada de la Universidad de Alcalá, intervino en la restauración del Hospital de Santa Cruz en Toledo y en la Iglesia de San Martín en Frómista, en la provincia de Palencia.

Por: Juan Mª Martínez Casado